La ciudad de Madrid es también otra de las protagonistas de la novela, podemos recorrer las calles y barrios de la época.
El miedo es el verdadero motor de la vida de casi todos los personajes de la novela: el miedo a las represalias – lo que incluía el más que probable fusilamiento – de los vencidos y el miedo de los vencedores a caer en desgracia o perder influencia, en función del pasado de cada uno y de la evolución de la guerra en Europa.
Comenzamos hablando de que es una novela muy larga y que no está escrito linealmente en el tiempo, lo que lo hace un tanto difícil seguir su lectura, considerando además que son muchos los personajes que intervienen.
Es un libro que deprime, pero es muy real, nosotros hemos vivido o conocido todas estas situaciones al ser hijos e hijas de la postguerra.
Impresiona el relato del traslado del fundador de la Falange.
Hablamos de que uno de los temas del libro es la traición. Valentín, Matías Revilla y Aníbal son personajes muy interesantes, moralmente deleznables, lo que desean es medrar. Se comenta la rapiña del Régimen, la lucha entre los diferentes grupos de poder.
Alguien comenta que en Madrid quedan muy pocas señales de los lugares emblemáticos de la Guerra y de la postguerra.
En el libro son muy extensas las descripciones. Nos ha parecido una novela excesiva, cuenta muchas historias que se entrelazan, entre ellas los ajustes de cuentas entre los miembros del PC.
Se señala que a medida que avanza la novela hay mucha acción y poca reflexión, por ejemplo, cuando un militante comunista tiene que matar a un camarada no hay un diálogo interior que nos haga ver qué es lo que pensaba en esos momentos. Se habla de que el autor trata peor al Partido Comunista que al otro bando, se hace esto notorio en el episodio del asalto a una casa de labriegos, el comportamiento de los guerrilleros es violento y tratan a los campesinos con poco respeto.
Otro tema es el de la ideología totalitaria, en un momento dado hablan de que “El partido siempre tiene razón, aunque no la tenga”.
Se comenta que estos hechos históricos se tendrían que estudiar en los institutos, en los años 70 y 80 no se llevó esto a las escuelas para no levantar odios, entonces que aún había supervivientes. Se comenta que en un libro de texto de esa época (finales del XX) se podía leer que la II República había sido la época más nefasta de la Historia de España. El miedo en aquellos tiempos hacía callar a la gente.
Alguien habla de que le ha resultado chirriante el hecho de que en los propios dirigentes del PC confiaran en el apoyo después de la Guerra de los Aliados, se supone que ellos debían de tener suficiente información para saber el estado de las cosas y no lanzarse a aventura como la invasión por el Valle de Arán y conocer cómo estaban la guerrilla de poco preparada y equipada para sostener un enfrentamiento con los franquistas. La gente no confiaba en el apoyo de las otras naciones, solo quería sobrevivir. Los Aliados estaban contra la República, conocían toda la experiencia de las Colectividades que se hicieron por la CNT.
Hablamos de que los mismos hechos se cuentan de diferente manera según quién los relate.
Se ve claramente en la novela que no se hace Justicia sino Caridad y en nuestros días también sucede esto con el papel que hacen las ONGs, que suplantan la responsabilidad de la Administración. Se habla en el libro de la apropiación de los hijos e hijas de los represaliados por familias franquistas.
Es una novela de acción no sabemos casi nada de los personajes, alguno de ellos, por ejemplo, Matías es olvidado en la última parte del libro, Martínez de Pisón en alguna entrevista reconoció que lo había marginado porque no daba más de sí.
Destacamos que las denuncias se hacían entre vecinos, en los pueblos se sabía quién era de un bando y quién era de otro, es una situación parecida la que puede haber en estos momentos en Nicaragua. El franquismo perduró porque fueron muy listos y se infiltraron en toda la sociedad. Franco tuvo mucha suerte con la Guerra Fría fue considerado el adalid de la lucha contra el comunismo, y la emigración y el turismo dio un impulso fuerte a la economía.
La novela es muy extensa, refleja bien la época, le falta equidistancia entre los bandos, es un libro de acción y los personajes carecen de reflexión.